Existen muchas patologías crónicas de las vías respiratorias y otras estructuras pulmonares que dificultan la entrada de oxígeno en los pulmones (insuficiencia respiratoria) provocando sensación de ahogamiento y fatiga física.
La rehabilitación respiratoria ha demostrado su eficacia (Foto: Fotolia)
Aunque hay diferentes tipologías y causas, todas comparten algunos factores de riesgo como el tabaquismo, la contaminación, los alérgenos y la exposición a partículas en suspensión como el polvo o los productos químicos.
El agotamiento físico y la dificultad para respirar impiden llevar a cabo muchas tareas de la vida cotidiana, algo que genera síntomas de depresión y ansiedad, por lo que este tipo de enfermedades conllevan trastornos asociados.
Algunos de los trastornos respiratorios más frecuentes son el asma, la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), la bronquitis crónica, la fibrosis quística, el enfisema, las alergias respiratorias y la hipertensión pulmonar, entre otros.
En España, más de 30.000 personas fallecieron por enfermedades respiratorias en el año 2010, lo que representa casi un 10 por ciento del total de las muertes registradas ese año en nuestro país.
Aunque las enfermedades respiratorias crónicas no tienen cura, existe un tratamiento que ha demostrado su eficacia en el control de los síntomas: la rehabilitación respiratoria.
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Se trata de un programa multidisciplinar e integral basado en la evidencia para pacientes con desórdenes respiratorios crónicos que son sintomáticos y a menudo han disminuido las actividades de la vida diaria.
Un tratamiento individualizado diseñado para reducir los síntomas, mejorar el estado funcional, aumentar la participación y reducir los costos de atención de salud a través de la estabilización o reversión de las manifestaciones sistémicas de la enfermedad.
La rehabilitación respiratoria incluye un tratamiento integral de la enfermedad que abarca control médico, educación, apoyo emocional, ejercicio físico, re-entrenamiento respiratorio y terapia de nutrición.
Un compedio de soluciones que tratan de mejorar la calidad de vida de los enfermos respiratorios y capacitarles para desarrollar las actividades cotidianas de la mejor manera posible para que tengan una vida completa y satisfactoria.
Esta terapia pretende atenuar los síntomas de la enfermedad, proporcionando autosuficiencia en los quehaceres diarios, aumentar el rendimiento físico, mejorar el estado emocional y además, disminuir las hospitalizaciones y sus gastos derivados.
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Para los más excepticos ahí van unas cuantas evidencias médicas de la eficacia de estos programas en el control de los síntomas y la mejora de la calidad de vida:
- Un estudio sobre rehabilitación respiratoria realizado por sanitarios españoles y publicado en 2006 declara que “la rehabilitación respiratoria ha demostrado beneficios en la tolerancia al ejercicio, en la reducción de la disnea, la mejora de la calidad de vida y de la ansiedad”.
- Un análisis realizado por Suzanne Lareau, profesora de medicina de la Universidad de Colorado (Denver, Estados Unidos), determinó en el año 2010 que “la evidencia de la mejoría de los síntomas, la capacidad de ejercicio, el rendimiento funcional, y la calidad de vida es más fuerte para la rehabilitación que para casi cualquier otro tratamiento en la EPOC”
Como prueba definitiva encontramos un meta-análisis realizado en 1996 y publicado en la revistaLancet, que analizó 14 ensayos sobre rehabilitación respiratoria en EPOC y encontró en todos ellos mejoras significativas de la calidad de vida de los enfermos. Los autores declaran que esta terapia produjo resultados más positivos en la calidad de vida y en la capacidad funcional de los pacientes que otros tratamientos como los broncodilatadores.
Por Monica De Haro
http://es.tendencias.yahoo.com/blogs/salud-y-bienestar/cansado-no-poder-respirar-bien-prueba-esto-101905122.html
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